Es de público conocimiento como históricamente los presupuestos de las distintas facultades de la Universidad Nacional de Asunción son manoseados y desviados para el beneficio personal de algunos corruptos.

No tendría que extrañarnos la denuncia realizada por funcionarios y alumnos de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Arte sobre la supuesta contratación de funcionarios fantasmas, desviando el dinero de contratos simulados a los bolsillos de algunos directivos de la facultad.

Esta y otras situaciones son resultado de la utilización de los cargos de dirección universitarios como botín político. ¿Cómo olvidar a “la comepapeles” María del Carmen Martínez Méndez? ex directora de Talento Humano, quien llegó al punto de tragar papeles que demostraban sus delitos y los del ex rector de la universidad Froilán Peralta, protegido político de Kale Galaverna.

La valentía de la denuncia hecha es lo que necesitamos para enfrentar a estas garrapatas de la educación pública. La persecución laboral que sufre el funcionario denunciante Richard Sánchez, que se traduce en la amenaza de desistir de las denuncias en caso contrario lo despedirían tiene que ser enfrentada con la solidaridad más amplia.

Es la unión de trabajadores y alumnos, que inclusive han sido acosados en sus propios hogares por personas involucradas en los actos de corrupción, la que hizo estallar esta denuncia y esta misma unión es una base imbatible para acabar con esta plaga.

¡Respeto a los derechos laborales de los trabajadores en la UNA!
¡Transparencia de la utilización de los fondos!
¡Solo la lucha cambia la vida!