La fiscalía condenó el día de ayer a Genaro Meza, miembro de la Federación Nacional Campesina, a una pena arbitraria de 20 años de prisión por supuestamente haber participado del secuestro del colono menonita Franz Wiebe como parte del Ejército del pueblo Paraguayo (EPP).

El Ministerio Público, como en todos los casos de persecución a organizaciones sociales, violentó todas las reglas que hacen al debido proceso, transgrediendo desde el inicio el principio de inocencia al estigmatizar a Genaro Meza presentándolo como culpable, implantó pruebas para la realización de pericias, colocó testimonios falsos y nunca realizó los cruces de llamadas para determinar la supuesta vinculación de Meza con los involucrados en el suceso.

La fiscalía transgredió el criterio de objetividad con el que debe guiarse en su labor, no tuvo en cuenta las fotografías y filmaciones en la que aparece Meza en Asunción los días en que ocurriera el secuestro, participando en las marchas y actividades de la Federación Nacional Campesina, y el partido Paraguay Pyahura, espacios en los que el mismo milita.

En otras palabras, la fiscalía actuó una vez más con un nivel de miserabilidad propia del autoritarismo más nefasto que lo caracteriza.

¡Absolución a Genaro Meza!

¡Basta de persecución a los luchadores sociales!

¡Basta de criminalización de la protesta social!