El Partido de los Trabajadores (PT) expresa su más amplia solidaridad con las y los campesino víctimas de la masacre de Curuguaty y acompaña de manera firme y enérgica las movilizaciones de las organizaciones sociales que repudian la condena a las y los compañeros presos por luchar en la histórica reivindicación del acceso a un pedazo de tierra y por la reforma agraria.

En el sistema económico y social en el que vivimos, al sector campesino se ha intentado anular como sujeto social para el desarrollo nacional, se lo ha privado de los derechos más elementales, se lo ha ninguneado durante décadas y ante los reclamos se los ha perseguido, estigmatizado y criminalizado. En esa tarea de invisibilizar y fustigar participan todos los partidos burgueses tradicionales, las agrupaciones reformistas, los gremios empresariales y los medios de comunicación al servicio de todos estos.

Son más de una centena de campesinos ejecutados desde la caída de la dictadura estronista. Toda la estructura Estado siempre ha estado al servicio de garantizar el modelo económico transnacional que representa la agro-ganadería. La condena arbitraria de los presos de Curuguaty es la expresión más palpable de la saña con la que actúa la burguesía cuando de defender sus intereses se trata. Las corporaciones, los políticos burgueses y los medios empresariales de comunicación no dudaron un momento para unificar sus discursos aplaudiendo la “ejemplar condena” mostrándose aliviados con la obsecuencia de la Fiscalía y del Poder Judicial.

La ocupación de Marina Kué, la masacre, la investigación sesgada, el proceso fraudulento, las violaciones sistemáticas de todos los derechos y garantías de los procesados, la parcialidad manifiesta de los agentes estatales, una condena aberrante; constituyen el escenario donde con mayor nitidez se observa como el terrorismo estatal es absolutamente consustancial al modelo neoliberal.

La policía Nacional, el Ministerio Público y el Poder Judicial son las marionetas más dóciles a los intereses capitalistas. Enfrentarlos implica la más amplia unidad de acción en las calles entre todos los sectores sociales y agrupaciones de izquierda. Sólo a través de un programa de lucha que levante con coherencia las reivindicaciones necesarias para la transformación radical de la sociedad y tome a la vez distancia de todas las expresiones burguesas que han embaucado en el pasado reciente a los trabajadores/as del campo y la ciudad, podemos enfrentar al Estado criminal y sus organizaciones. Con una delimitación clara de la política burguesa y con un marco político revolucionario, independiente y clasista debemos agruparnos y como un sólo puño golpear las policitas del capital nacional y internacional.

Desde el Partido de los Trabajadores, sostenemos que las y los compañeros/as de Curuguaty son parte de la clase trabajadora más sufrida y golpeada, son parte del sector campesino que de manera heroica vienen resistiendo los embates de las políticas neoliberales. Estamos convencidos que el pueblo trabajador para poder cambiar y mejorar su calidad de vida, necesita de la más amplia unidad para poder luchar, uniendo fuerzas y caminar hacia movilizaciones y acciones de conjunto de manera a poder revertir la condena de nuestras/os compañeros/as y ponernos a la ofensiva contra los planes del narco-gobierno criminal del partido colorado con Cates a la cabeza.

¡POR LA NULIDAD DEL PROCESO DE CURUGUATY!

¡POR LA LIBERTAD INMEDIATA DE LAS Y LOS PRESOS POLITICOS!

¡POR LA INMEDIATA ADJUDICACION DE LAS TIERRAS DE MARIAN KUEA A LAS Y LOS COMPAÑEROS/AS DE CURUGUATY!

¡REFORMA AGRARIA!

 ¡UNIDAD PARA LUCHAR, POR UN GOBIERNO OBRERO, CAMPESINO Y POPULAR!

Comité Ejecutivo Nacional – PT

Asunción, 15 de julio de 2015