El pasado 30 de agosto, el titular de Hacienda, Benigno López, presentó el proyecto del Presupuesto General de Gastos de la Nación para el 2020, donde se ven enormes recortes en varios sectores. Uno de los ministerios más afectados es el Ministerio de la Mujer el cual tuvo un recorte del 5 %. Este pasaría de 23.000 millones de guaraníes a 22.000 millones, lo que implica que para el 2020 la cartera destinará solo 6.000 guaraníes por cada mujer.
¿Cómo abordar cuestiones tan básicas como la salud integral de las mujeres; problemas tan complejos como los feminicidios y las distintas violencias ejercidas hacia ellas con este presupuesto? ¿Cómo avanzar hacia la igualdad real y efectiva, allanando los obstáculos que la dificultan o impiden?
El Estado, mínimamente, debería garantizar los derechos conquistados por las mujeres invirtiendo el presupuesto necesario; sin embargo, el Ministerio de la Mujer es el de menor presupuesto de todos los ministerios.
Este recorte pone en riesgo el funcionamiento de cuatro centros asistenciales del interior y de tres albergues que acogen a mujeres con sus hijos e hijas. Con la disminución, ya no se podrán comprar alimentos, pañales y medicamentos suficientes.
Otro de los servicios que está en peligro, antes de cumplir 2 años de funcionamiento, es Ciudad Mujer, que se encuentra en Villa Elisa y atiende, en promedio, a 350 mujeres por día ofreciendo servicios de salud sexual y reproductiva, apoyo para el empleo, además de asesoramiento, contención y asistencia ante casos de violencia contra la mujer, impulsando la inclusión socioeconómica y el empoderamiento femenino; siendo la medida más eficaz, hasta ahora, en cuanto a atención concreta para las mujeres que están en situación de violencia.
Las campañas de prevención contra la violencia de género también se verán afectadas por el recorte. La Dirección General del Observatorio del Ministerio de la Mujer emitió un informe sobre la cifra actual de los casos de feminicidios en Paraguay que asciende a un total de 28 (veintiocho) víctimas en lo que va del año. A esto sumémosle los 65 niños y niñas, hijos que quedan huérfanos y son víctimas colaterales de este flagelo.
Los datos resaltan la total desprotección del sector de las mujeres y que los planes del gobierno sólo quedan plasmados en papeles y en discursos vacíos. Ni la autonomía, ni el desarrollo integral y mucho menos el supuesto empoderamiento de las mujeres está en la agenda del gobierno que con este recorte violenta una vez más a todas las mujeres, en particular a las mujeres de la clase trabajadora.
Con esto se demuestra que si no estamos movilizadas, el gobierno nos quita lo poco que logramos conquistar. El movimiento de mujeres no debe bajar la guardia.
Este 25N debemos salir a las calles a exigir al gobierno: No al recorte del presupuesto y sí al aumento para garantizar mayor cobertura de los servicios.